- Garantiza el acceso directo y permanente al recurso electrónico que identifica, aunque cambie su dirección en la red.
- Aumenta la visibilidad de las publicaciones científicas, aumentando el nivel de citación, ya que permite su rápida identificación y acceso. Muchos artículos "en prensa" de grandes editores (Elsevier, Springer...), publicados en las plataformas electrónicas antes de su publicación impresa, ya cuentan con un DOI.
- Garantiza la propiedad intelectual de un recurso electrónico, gracias a la información que lleva asociada en sus metadatos.
- Proporciona mayor difusión gracias a la interoperabilidad con otras plataformas, repositorios o motores de búsqueda.
En definitiva, el DOI permite al personal investigador: saber qué tiene, encontrar lo que quiere, saber dónde está, y poder acceder, así como reutilizar contenidos.